Los coches, para propulsarse, tienen un motor de combustión interna, alimentado por combustible, que normalmente es gasolina, el combustible se quema durante su uso y emite unos gases que son expulsados por el tubo de escape.
Precisamente son estos gases, entre los que se encuentran el Dióxido de Carbono (CO2) y el monóxido de carbono (CO), que son emitidos a la atmósfera contribuyendo al efecto invernadero y destrucción de la capa de Ozono, creando una peligrosa contaminación que no solo afecta la capa de ozono sino también la salud de todas las personas.
En Oslo la capital de Noruega acabarán con el tránsito de autos en toda la ciudad y se convertiría en la primera metrópolis del mundo en que los vehículos dejaran de circular, quedarán la bicicletas.
Se estima que el proyecto afectará a más de 350 mil propietarios de automóviles, el gobierno hará una inversión para la construcción de 56 kilómetros para carriles de bicicletas.
El proyecto tiene como meta que los habitantes lleven una vida más activa, mejoren su salud, halla una disminución de la contaminación en la ciudad y en la seguridad vial.
Se prevé que el proyecto se ponga en marcha en otras ciudades en 2019, Otras ciudades como Madrid también planean eliminar por completo los automóviles para el año 2020.
Realmente la eliminación de los carros no será del todo, los autobuses y transvías continuaran funcionado en el centro de la ciudad y habrá excepciones para vehículos que transporten a personas discapacitadas o mercancías a las tiendas.
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