Windows 10 sigue siendo el sistema operativo de moda y muchos quieren probarlo o tenerlo en sus computadoras, aunque recibió algunas mejoras importantes, todavía permanecen algunos problemas cotidianos de los SO creados por Microsoft.
Tener un arranque rápido en Windows ha sido un dolor de cabeza para muchos y sin lugar a dudas, es un poco tedioso esperar y esperar para ver el escritorio. Hoy abordaremos el problema centrándonos en los mejores consejos, trucos y aplicaciones para acelerar el arranque de Windows.
Desinstalar los programas preinstalados
Cuando la computadora es nueva, es muy posible que el fabricante lo haya llenado de aplicaciones que quizás nunca utilicemos en nuestra vida y que lo único que hacen es consumir recursos.
La mejor solución para esto es eliminarlas o desinstalar todas las que queremos o una sola en la sección programas y características de Windows, opción que encontramos en el panel de control.
Aprende a instalar Windows 10 sin software y aplicaciones del fabricante
También nos encontramos con aplicaciones como PC Decrapifier, nos facilitan este proceso. Esta herramienta analiza nuestro PC y nos muestra las aplicaciones que nos recomienda desinstalar. Es muy intuitivo lo hace en tres pestañas, una en que nos muestra las aplicaciones que debemos desinstalar sin pensarlo 2 veces, otra para las cuestionables y una tercera para las cuestionables o que no tiene suficientes datos.
Incorporar un disco SSD para acelerar todo el sistema
El problema de arranque lento de Windows puede ser a causa de ese viejo disco duro que utilizas. Es recomendable que saltes a un SSD, notaras que tu ordenador de repente vuela.
Tampoco tenemos que olvidar que cuando lo llenamos a más del 85% de su capacidad, la falta de espacio puede afectar a la velocidad de nuestro equipo.
Eliminar archivos temporales
Los archivos temporales son creados por las aplicaciones de Windows cuando no puede asignar memoria suficiente a sus tareas o el propio sistema realiza copias de seguridad antes de modificar un archivo, en caso de que haya que restaurarlo.
Normalmente estos archivos no suelen causar muchos problemas, pero acumulados cuando no tenemos mucho espacio en el disco duro puede acabar ralentizando todo el ordenador.
Por defecto se ubican en C/Windows/Temp o puedes descargar la aplicación CCleaner que hará el trabajo por nosotros. Es un completo limpiador que analiza el equipo en busca de archivos sobrantes, incluidos los temporales, los cuales podrás eliminar directamente desde la aplicación.
Controla que aplicaciones se inician con el equipo
Cuanto más programas estén configurados para ejecutarse al encender el equipo más lento será el proceso de inicio de Windows. Debemos asegurarnos de que solo se inicien los programas estrictamente necesarios. Para verificarlo solo tendremos que ir al Administrador de tareas de Windows y pulsar sobre la pestaña inicio.
Atajo- (Ctrl + Alt + Supr)
La ventano nos muestra el nombre de todos los elementos que se inician al arrancar el equipo y quiénes son sus desarrolladores, su estado, si tenemos habilitado o no el que se inicien y el impacto en la actividad del disco duro y CPU. Cuanto mayor sea el impacto más lento será el inicio del sistema.
Optimizar el proceso de carga
Para asegurarnos de optimizar al máximo esta carga es importante, para empezar que tengamos configurada la BIOS para arrancar directamente desde el disco duro donde está el sistema operativo y que no pierda tiempo buscando primero en otras unidades.
Para comprobar si hay algo que esta fallando durante el arranque del sistema, Windows también tiene una aplicación nativa que puede sernos muy útil. Se llama visor de eventos, y se ejecuta lanzando eventvwr con la herramienta ejecutar. En las carpetas aplicación y sistema, del menú izquierdo veremos un registro de todos los errores que hayan podido surgir.
Si queremos asegurarnos de que la herramienta sólo registre los inicios del sistema, lo único que tendremos que hacer es vaciar sus registros, reiniciar el ordenador y volver a abrirla. De esta manera podemos estar seguros que solo nos salen los posibles problemas que hemos tenido en el proceso de inicio de Windows.
Activar el inicio rápido de Windows 10
Es de gran beneficio aprovechar esta importante opción, para llegar a ella hay que abrir el panel de control y acceder a las opciones hardware y sonido. En las Opciones de energía buscamos la que pone cambiar las acciones de los botones inicio/apagado y abajo del todo, en la configuración de apagado, tenemos que asegurarnos de tener activada la opción de activar inicio rápido.
También se debe mantener limpio de polvo nuestro ordenador para que no obstruya el funcionamiento de los ventiladores, puede generar lentitud y mal funcionamiento del equipo.