La historia del arte y la creatividad nos ofrece multitud de personas que han demostrado estar en el más alto nivel de capacidad intelectual, artística y emocional a edades consideradas muy avanzadas. Pau Casals, a los 96 años estaba en plena capacidad creadora, igual que Picasso a los 91, Rubinstein a los 90, Victor Hugo, Goethe y Matisse a los 83, Platón, Kant y Verdi a los 80, Fleming a los 74, Pasteur a los 73, Wagner y Leibniz a los 70.
Vemos cómo su capacidad intelectual y creativa no decrece ni depende de la edad. Así lo ha demostrado Steve Deddens el abuelo programador que llegó a Microsoft a los 70 años, luego de ejercer como piloto durante 32 años, su pasión por la programación era evidente entre sus compañeros y su pasatiempo favorito tenía que ver con desarrollar sitios web y aplicaciones, donde logró aprender lenguajes de programación como HTML, CSS, Ruby y Javascript.
Fue un curso intensivo de 12 semanas sobre desarrollo web el que marcó un nuevo rumbo en su vida: ahora trabaja para una empresa que brinda servicios de tecnología al gigante Microsoft.
Deddens, de 73 años, es un piloto comercial pensionado nacido en Austin, Texas (EE. UU.). Cuando llegó el momento de retirarse, después de volar durante 32 años y de haber pertenecido a la Fuerza Aérea de Estados Unidos, su espíritu inquieto, curioso y emprendedor permaneció intacto y ahora es un programador con lo había soñado.
Una de sus grandes pasiones también ha sido la ingeniería aeronáutica donde dejó un gran legado como piloto e instructor, pero su vena de programador siempre estaba vigente ahí creo un programa para agilizar el proceso de programación y horarios de vuelos de la aerolínea para la que trabajaba. Por eso realizar un curso para aprender a escribir código y desarrollar sitios web después de pensionarse no le pareció una idea descabellada. Investigó y en 2015 se inscribió a un programa ofrecido por General Assembly, una escuela que ofrece clases sobre programación en Estados Unidos.
Durante el curso creó varios sitios web, un juego de lógica para ejercitar la mente y una herramienta llamada The Bird (El pájaro), que permite a los usuarios identificar los lugares específicos donde están ubicadas diferentes especies de aves. “Una persona toma una foto de un pájaro y la sube, y otros pueden ver la información. También se podía ubicar en un mapa el lugar exacto en el mundo donde vieron ese pájaro, lo cual puede ser muy útil para las personas que están interesadas en el tema”, comenta.
En su caso, sin pensarlo, logró llegar a una de las compañías de tecnología más importantes del mundo. Gracias a su exitosa participación en General Assembly, fue postulado para participar en el Leap Microsoft, un programa de capacitación de 18 semanas para desarrolladores de ‘software’ que tiene lugar en la sede de la compañía en Redmond, Washington (EE. UU.). “Lo primero que pregunté fue si la posición estaba disponible para personas de mi edad, lo que me sorprendió”.
“La experiencia es arrolladora y trabajo con gente muy joven lo que implica un gran reto, debo mantener mi cerebro en acción, pero siento que pertenezco a este equipo y que mi aporte es importante”.