En su momento, la revolución industrial desapareció muchos empleos a partir
del uso de maquinaria para realizar muchas tareas, y de ese mismo modo, hay
muchas funciones humanas que están empezando a ser reemplazadas por las
habilidades de las Inteligencias Artificiales. En la etapa actual, también
conocida como la cuarta revolución industrial, la robótica inteligente ha
venido desarrollándose a tal punto de ser capaz de dejar a un lado algunos
empleos que se creían intocables, como los de oficinistas.
Sectores del comercio como el turismo, la restauración, consultoría y la
docencia se han empezado a ver afectados y temen por su integridad durante
los próximos años.
A pesar del pánico que nos puede generar, y todas las posibilidades
catastróficas que implica la evolución de las IA, existen algunas
competencias del ser humano que con mucha dificultad llegarían a ser
realizadas por robots; incluso, algunas habilidades son imposibles de
copiar, pues demandan observación, reflexión e interacción con el
mundo.
Destrezas humanas que jamás podrá reemplazar la Inteligencia Artificial
Por ello queremos compartir contigo nueve habilidades que las inteligencias
artificiales no han reemplazado y es muy difícil que lo hagan.
1. La creatividad.
Las IA son capaces de procesar mucha información, pero aún así, no son
capaces de crear, soñar e imaginar objetos o procesos que aún no existen. A
pesar de que puedan crear nuevas imágenes o generar contenido original, no
es producto de la creatividad, en lugar de ello, es fruto de otros elementos
que ya existían.
2. Pensamiento crítico.
A pesar de contar con un respaldo de los datos, también es importante contar
con un nivel de desconfianza, condición que es parte del análisis crítico y
el discernimiento que obtiene una persona mediante la experiencia y el
estudio. Por ahora, las IA no son capaces de detallar las falsedades y
engaños del mundo y de la información que recibe.
3. Inteligencia emocional y empatía.
La transformación de los robots a seres emocionales todavía está estancada
en las películas, y las tecnologías que existen actualmente no cuentan con
esas capacidades. Por esta razón, no existe una conciencia en ellas ni son
capaces de incidir en aspectos sociales como lo hacemos los humanos.
4. Comunicación interpersonal.
Aunque las IA emitan voces o se hagan pasar por personas, aún están lejos de
transmitirnos lo que puede lograr alguien más. Además de hablar o enviarte
un mensaje, la comunicación implica una interacción desconocida para las IA.
5. Conciencia ética.
Por otro lado, las IA han demostrado desconocer lo relacionado con la ética,
demostrando sesgos discriminatorios a raíz de su falta de saber social.
Aunque la ética sea distinta para casi todas las personas, los problemas
morales se abordan a partir del saber humano y toda la sensibilidad que
implica.
6. Toma de decisiones.
El procesamiento de datos de manera instantánea es algo que no viene en
nuestro cerebro, sin embargo, nuestra lógica y manera de trabajar, nos
permite ser capaces de tomar decisiones concretas a partir del contexto y
los datos que tenemos a nuestro alcance. Un robot podría hacerlo a partir de
elementos objetivos, pero lo subjetivo, como la moral, la felicidad o las
relaciones sociales, no están al alcance de las IA en estos momentos.
7. Trabajo en equipo.
Hasta el momento, las tecnologías no han demostrado una capacidad de trabajo
en equipo, la cual suele ser protagonista en los currículum de las personas.
Esta cualidad, así como algunas mencionadas con anterioridad, no son tan
usuales incluso entre humanos, y aún así, es muy necesaria y destacable.
8. Adaptabilidad y flexibilidad.
Bien sabemos que las dinámicas sociales, culturales y económicas se
encuentran en cambio constante, procesos que complican mucho el trabajo de
las IA, pues los cambios son más costosos para ellas, mientras que nosotros
estamos acostumbrados a las transformaciones del entorno.
9. Capacidad de liderazgo.
Para tomar decisiones e interactuar de manera positiva en un grupo de
trabajo, es importante contar con capacidad de liderazgo. Aunque no sea
fácil ser jefe, hay quienes deben asumir estas responsabilidades y ser
capaces de invitar a la gente a hacer parte de sus proyectos y objetivos,
tarea complicada para un robot sin capacidades sociales y
empáticas.